31 de marzo de 2018.
Fue asesiando a balazos por pandilleros, cerca de donde nació y creció en un cantón del municipio de Lolotique del departamento de San Miguel
La policía aún no ha realizado capturas de los sospechosos de asesinar al padre Walter Osmir Vásquez Jiménez, el pasado Jueves Santo, cuando se dirigía al caserío Las Lajas del cantón Las Ventas, de Lolotique, para celebrar la Misa del Lavatorio de los pies. El sacerdote era de la parroquia en Mercedes Umaña, pero realizaba un refuerzo a la zona.
Familiares y amigos del sacerdote revelaron que anteriormente había sido amenazado por pandilleros que “le pedían colaboración (dinero)” pero él se había negado e incluso cambió su número de teléfono para evitar la extorsión; otra de las hipótesis es que fue asaltado antes que le dieran muerte, ya que el cuerpo no tenía sus pertenencias como billetera y teléfono; así, como se sospecha que lo asesinaran por sus prédicas a favor de los más vulnerables.
Pese a estos testimonios, las autoridades no han concretado capturas, y estos son solo indicios que se señalan en el reporte en manos de la policía, que ya inició las investigaciones.
El padre Vásquez Jiménez tenía ocho años de ser sacerdote, y estaba destacado como vicario, en la parroquia de Mercedes Umaña, diócesis de Santiago de María.
El día del asesinato, el párroco de Lolotique le había pedido le ayudara a celebrar las Misas, a lo que había aceptado gustoso. Junto a otras personas se movilizó a la zona de Las Ventas para dar atención a la comunidad, cuando fue abordado por tres sujetos enmascarados y armados con fusiles de alto poder y pistolas. Estos se conducían en una camioneta todo terreno, según la policía.
El religioso manejaba un vehículo haciéndose acompañar por dos personas que fueron separadas del grupo, siendo él la única víctima mortal. El cura recibió un primer disparo e intentó correr malherido, pero luego le dieron alcance y le asestaron otro tiro que acabó con su vida.
El cuerpo del sacerdote fue velado todo el Viernes Santo y también lo será este Sábado, para ser enterrado el Domingo.
Su crimen ha sido repudiado por la jerarquía católica y por la feligresía de la diócesis de Santiago de María, así como por el gobierno de la República.
Información DLP.
Fotos cortesía.